20 noviembre 2005

Tipos de noviazgo

Sentido del noviazgo. Tipos de noviazgo
Lupita Cervantes

Algunos de los noviazgos en los que te puedes ubicar:
El madrugador
El ’nada que ver’
El ’derrama miel’
El masoquista
El super héroe
El amiguero
El ’peor-es-nada’
El carcelero
El ’a todo dar’

El madrugador
Aquí no aplica la frase al que madruga Dios lo ayuda. El noviazgo madrugador se refiere a aquellos novios que todavía son muy chavitos y les falta una verdadera inmensidad de tiempo para casarse (porque todos sabemos que el noviazgo es una etapa de conocimiento y aceptación donde la pareja se prepara para un posible matrimonio).
Aún les falta terminar la secundaria, la prepa, la carrera y trabajar unos dos años, mínimo, para juntar algo de dinerito. Haz cuentas... He aquí que nos topamos con noviazgos de cinco, seis, nueve años, lo cual, aunque no lo creas puede ser un tanto perjudicial, porque aveces se brincan etapas a las que más tarde querrán regresar, y porque cuando las cosas se vuelven más monótonas y aburridas, uno de los dos puede hartarse y dejar al otro por alguien más.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Si todavía estás en la secundaria o en la prepa, es decir, entre los 12 y los 18, mejor no te involucres en nada demasiado serio. Sal con amigos, diviértete y date la oportunidad de conocer. De esta manera podrás saber exactamente a qué le tiras, qué tipo de noviazgo quieres y cuáles son las cualidades que consideras indispensables en tu pareja. Sólo así tendrás un punto de comparación.
Acuérdate de esto: algún día, tarde o temprano, te llegará el momento de tener novio o novia; sin embargo, ahora es tiempo de hacer amigos, de conocer gente, de divertirse sanamente... no lo cambies por algo que de todos modos llegará.

El ‘nada que ver’
Ve tú a saber porqué se hicieron novios estos dos, pero la verdad es que no tienen nada en común: gustos, costumbres, creencias, educación, clase social, puntos de vista, amistades, familias, etc. Tal vez se hicieron novios porque se sintieron atraídos por la superficie de la otra persona: me gustó su sonrisa, me fascina su mirada, es guapísimo o está muy bonita; pero en el fondo piensan diferente con respecto a cuestiones importantes como: el respeto a la vida, el noviazgo y las relaciones prematrimoniales, las creencias religiosas, el trabajo, la familia, etc.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Cuando la pareja no tiene intereses en común y no posee la disposición de desarrollarlos; cuando no son capaces de compartir juntos ni los rayos del sol; cuando cada uno jala por su lado sin prestar atención al otro... sobra decir que el truene es inminente y necesario. No olvides que el noviazgo es una época para compartir y convivir.

El ‘derrama-miel’
Se le llama así porque la pareja es muy empalagosa, es decir, no puede estar ni un momento sin tocarse. Siempre que los ves están abrazados, dándose besitos, diciéndose cositas al oído y, sobra decirlo, siempre están de manita sudada. Esto no está del todo mal porque, como en cualquier noviazgo, existe la atracción física; sin embargo, es muy importante que detrás de esa atracción un tanto superficial, se desarrolle una atracción mucho más profunda, una atracción emocional. Porque, ¡oh, desilusión!, la pasión del inicio reduce con el tiempo y si no hay nada más que sostenga la relación, si en el noviazgo sólo había identificación física, entonces el cortón está a la vuelta de la esquina.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Al principio, todas las relaciones tienen su etapa de derrama-miel, pero si ya llevan varios meses juntos y cada vez que se ven es sólo para tocarse y sentir bonito; si no han hablado seriamente entre los dos, ni se conocen con profundidad porque han estado muy ocupados derramando miel por todos lados; entonces, temo decirles que lo suyo es pura atracción sexual y no les interesa ni un comino lo que el otro piensa.
Tarde o temprano, el atractivo se acabará y, créeme, también el noviazgo. Una relación así no vale la pena, sobre todo si tomas en cuenta los riesgos que corres al involucrarte con alguien que sólo te quiere por tu físico: pueden comenzar una relación sexualmente activa y entonces es muy probable que ocurra un embarazo. Y todo porque no quisieron echar a perder la pasión del momento, echaron a perder su vida y tal vez la de otro ser inocente.

El masoquista
Es el tipo de relación donde los novios se pelean más tiempo del que están en paz. No pueden entablar ninguna conversación sin que ésta termine en una horrible discusión. Siempre se la pasan reclamándose, gritándose, lastimándose... es decir, una constante sensación de infelicidad.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Analiza: ¿tu relación te produce más lágrimas y preocupaciones que risas y momentos de alegría? Si es así, entonces es el momento de salir corriendo... ¡pero ya! Quien te ama de verdad, sólo desea tu bien y no busca hacerte sufrir; por el contrario, hace todo lo posible para verte feliz en cualquier momento.

El súper héroe
Digamos que uno de los dos se la pasó rentando las películas de superman durante toda su niñez y, como consecuencia de este exceso de heroica fantasía, ahora el susodicho o susodicha creen fervientemente que ellos son algo así como la salvación para su pareja.
Bueno, hablando en serio, este tipo de noviazgo es más común de lo que crees. Sucede cuando te enamoras de alguien con problemas ya sea físicos o emocionales y quieres resolvérselos o ayudarlo a sentirse mejor. Yo lo veo mucho en chavas que se enamoran del típico niño rebelde, ya sabes: fumador empedernido, borrachín, mujeriego, incluso hasta medio drogo. Ellas juran que lo van a hacer cambiar, que su amor le va hacer enderezar el camino...
¿Cómo puedes saber si eres un novio súper héroe? Fácil. Nada más pregúntate cómo ves tú a tu pareja. Si la ves igual que tú, con defectos y cualidades normales, entonces andamos bien; si la ves por debajo de ti, como alguien con muchos problemas, baja autoestima, problemas de actitud, que necesita que alguien le ayude urgentemente, entonces ya tienes bien puesto tu disfraz de súper héroe.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Sin ánimos de ofender, sólo tengo tres palabras para los novios súper héroes: ja ja ja. Es muy difícil que sólo el amor haga que una persona con problemas graves cambie; para esto hace falta terapia, fuerza de voluntad y que la persona desee cambiar. No te hagas bolas ni imagines que eres batichica o el hombre araña porque no lo eres. Eres una persona común, con necesidades comunes y cualidades comunes; mientras no tengas una capita mágica que te haga volar por el espacio o unos poderes sobrenaturales, estas llamada a tener un novio normal, con defectos normales; alguien que sea capaz de darte seguridad y confianza a ti también.

El amiguero
Es el típico especimen que trata a su novia(o) como si fuera uno más del grupo de amigos. Nunca tiene tiempo para su pareja porque prefiere andar con sus amigos en el reventón; y si la novia o el novio se molesta por esta situación...¡¡¡aguas!!!... se desata la tercera guerra mundial porque el individuo en cuestión argumenta que no tiene libertad, que la pareja solo quiere acapararlo, que necesita su propio espacio y no sé cuantas cosas más. He aquí que la pobre incauta tiene que aguantarse las horas de parranda con los amigotes de su novio porque no hay otra forma de pasar tiempo con su amorcito.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Si al leer estas líneas te zumbaron los oídos y sentiste como si un enorme dedo índice te apuntara directamente a tu pimpolluela cara... quiere decir que hubo una identificación entre tú y este tipo de noviazgo. Si tú eres la víctima de la situación, es decir, si tienes que aventarte el maratón cada fin de semana con los amigos de tu novio o la amiguitas de tu niña, es preciso que hables claro con tu pareja y le expliques que el noviazgo es algo más que una simple amistad. La etapa de noviazgo se caracteriza por el conocimiento profundo de la otra persona a fin de que sepamos con claridad si deseamos pasar con ella el resto de nuestra vida. Esto no se puede lograr si no salen solos de vez en cuando y platican de cosas importantes para los dos.

El peor-es-nada
De repente, como si se tratara del rotavirus, todas tus amigas y amigos empiezan a salir con chavos y chavas y empiezan a formarse las parejitas de novios. Tú, cual témpano de hielo en medio del océano, sigues sin pescar ni los rayitos del sol. Es por eso que caes redondita con el primer incauto que te diga palabritas de amor al oído.
Es normal que te sientas un poco aislada porque todas tus amigas o tus cuates ya tienen pareja. Créeme que conozco por experiencia la pesadilla de llegar a una fiesta y estar solita porque todos andan acompañados y a ti nadie te hizo el favor de avisarte que era una cena de parejas. Lo que no es normal es que te lances a iniciar una relación de noviazgo sólo porque te sientes urgida o urgido, según sea el caso. Sería muy injusto para tu pareja, ¿no crees? Peor aún, ¿cómo te sentirías si tú fueras el peor-es-nada de otra persona?
Consejo: Tómalo o déjalo...
Es hora de que revises con profundidad cuál es tu concepto de noviazgo y qué esperas de una relación de pareja. Si lo que buscas es simplemente compañía para no sentirte tan solo, es mejor que le digas adiós a esa novia o a ese galán... no estás siendo justo y eso no se vale; tarde o temprano te vas a arrepentir y será más difícil terminar la relación. Busca más amigos, sal a pasear con ellos. Recuerda que un noviazgo va más allá de la compañía o la amistad; un noviazgo es un compromiso de aceptación, respeto y amor.

El carcelero
No tengo ni la menor idea de cómo se siente estar en la cárcel pero no hay que tener mucha experiencia en esos asuntos para asegurar que ninguno de los que ya han pisado ese terreno desea volver ahí. Imagínate lo horrible que ha de ser estar vigilado las 24 horas del día, no hacer nada a tu antojo, vivir con el temor de que te vayan a castigar por algo que tú ni hiciste, etc., etc., etc. Escalofriante ¿verdad? Pues me temo que esto pasa más allá de los muros de una prisión.
Es muy común ver a jóvenes (hombres o mujeres) que se encuentran esclavizados a una pareja que no les permite hacer nada por temor a que se vaya de su lado. Esto es pura falta de confianza en la otra persona y una relación de noviazgo no puede crecer y fortalecerse si no cuenta con la base de la confianza mutua.
Fíjate bien, cuando se trata de un novio carcelero: No la deja salir con sus amigas porque dice que nada más salen a ligar; no la deja ponerse ropa ajustada o que resalte sus atributos corporales; no le gusta que se maquille y que se ponga bonita; se convulsiona si se entera que su novia habló por teléfono con un amigo (hombre, por supuesto) y, todavía peor, le da una embolia cerebral si se entera de que vio a su ex novio y que platicó con él.
Si se tratara de una carcelera: Quiere saber en dónde y con quién esta su novio las 24 horas del día; no soporta que tenga amigas; se muere de la rabia cada vez que sabe que la ex de su novio está en el miso lugar donde están ellos y lo amenaza con dejarlo si se le ocurre saludarla; se pone verde del coraje cuando al niño se le ocurre decir que Christina Aguilera esta muy bonita o que Britney Spears tiene un cuerpazo; organiza un complot con sus amigas para estar vigilando a su novio todo el día; checa la cuenta de correo electrónico de su galán sin que éste se entere; etc. etc.
Consejo: Tómalo o déjalo...
Si tú eres el del complejo de carcelero, es mejor que analices tu autoestima. El problema es que crees que no eres lo suficientemente bueno o atractivo para mantener a tu pareja a tu lado y te sirves de muchas artimañas para retenerla contigo; sin embargo, tu juego te va a perjudicar porque a nadie le gusta estar con alguien que duda de sí mismo y de su pareja. Cada quien es como es y tiene una personalidad y estilo propios; no destruyas la personalidad de tu pareja sólo porque tienes miedo de que alguien más te la vaya a arrebatar. Habla con ella o con él y cuéntale tus miedos, vas a ver que te vas a sentir mejor contigo mismo y vas a confiar mucho más en ella.

El ‘a todo dar’...
¿Qué te podré decir de este noviazgo? Es el mejor de todos. Es desinteresado, porque no pide nada a cambio de lo que da; es sincero, porque se muestra tal cual es; es respetuoso, leal, maduro, alegre, hay libertad y confianza y, sobre todo, fidelidad total.
Es aquella relación en donde sólo te interesa hacer feliz al otro, donde te preocupas por sus problemas y te alegras de sus éxitos como si fueran tuyos. Es el noviazgo en donde los dos se ayudan a ser mejores y son el uno para el otro, testimonio de pureza, amistad, sinceridad y coherencia. Conocen los defectos del otro, pero los aceptan y luchan para convertirlos en cualidades.
Consejo: Tómalo o déjalo...
¡Adelante! Si siguen así, las cosas van a funcionar de maravilla porque juntos saben divertirse sanamente; tienen muchos puntos en común, no sólo se gustan físicamente, sino que también se atraen emocionalmente; su comunicación es excelente y tienen planes y proyectos que los involucran a ambos.
Bueno, hay muchos estilos de noviazgo que no desarrollé pero lo importante es que analicen su noviazgo, vean si pueden mejorar como personas y como pareja y... ¡aprendan a amar de verdad!

® Masalto.com

El timo del sexo seguro

Fracaso de las campañas. Análisis de las campañas del “sexo seguro”
Por Antonio Orozco

CANJE DE TABU SUPUESTO POR FETICHE AUTENTICO
Afortunadamente el sexo no es un tabú, cosa que no se pueda mentar o se deba silenciar. Pero -como escribe Claudio Sorgi- en estos tiempos se ha convertido en algo no menos grave, "en un fetiche, en una especie de divinidad adorada, temida, mimada y usada obsesivamente como signo de autoafirmación y realización". Asistimos a una evidente inflación de sexo. El tema invade las conversaciones de café, las pantallas grandes o pequeñas, las revistas, prensa y radio, la publicidad privada y la publicidad oficial. Se diría que acontece una especie de obsesión universal por el sexo. Aunque habría que matizar. La obsesión no es por los valores que contiene el sexo en sí, sino por el placer genital que ciertos consabidos usos ofrecen, desconectándolos de su natural consecuencia: la fidelidad y la procreación.

EL MATERIALISMO FREUDIANO
Estamos ante una ola de materialismo que reduce hombre a sexo, y sexo a sensualidad saturada. Esa tendencia desorbitada que se acusa siempre en épocas decadentes, ha sido nutrida por una pseudociencia que Freud supo popularizar hace medio siglo. Se trata de un método ideado para curar ciertos estados psicopatológicos, conocido con el nombre de "psicoanálisis", impuesto en muchas aulas y centros médicos de los últimos tiempos. Tan grande ha sido su éxito que muchos que nada han leído de Freud, pero también numerosos profesionales poco avisados, se escandalizarían de lo que acabamos de decir. Freud todavía es, en sectores de escaso nivel científico o cultural, una especie de intocable monstruo sagrado de la psicología experimental. Siendo esto así, no es extraño que la inercia mantenga todavía una gran fuerza y sea conveniente escuchar la voz de los expertos más competentes y avanzados en la terapéutica psicopatológica.

OPINION DE LOS CIENTIFICOS
Aquilino Polaino Lorente, catedrático de Psicopatología, de la madrileña Universidad Complutense, ha publicado varios trabajos sobre el tema y, recientemente, un artículo especialmente ilustrativo (), en el que recoge la opinión de otros científicos, como Sir Peter Medawar, premio Nobel de Medicina y Hans J. Eysenk, profesor de Psicología de la Universidad de Londres. Este último ha escrito un fundamentado ensayo que lleva un elocuente título: "Decadencia y caída del imperio freudiano" ().
Después de examinar durante lustros, casos tratados por Freud, Eysenck concluye que "Freud fue, ciertamente, un genio, pero no de la ciencia, sino de la propaganda; no de la prueba rigurosa, sino del arte de persuadir; no del esquema de experimentos, sino del arte literario". Eysenck dice que aunque éste parezca un juicio duro, el futuro lo respaldará.
Por su parte, el doctor Polaino Lorente afirma que aunque los partidarios del psicoanálisis freudiano consideren a Freud como el liberador de la represión sexual del hombre, el hecho es que no sólo no hizo tal cosa, sino algo bien distinto: intentó comprender la neurosis desde un punto de vista meramente sexual y lo que hizo, en realidad, fue sexualizar la neurosis y, como consecuencia, neurotizó la sexualidad humana. "No deja de ser curioso -añade el profesor de la Complutense- que cuanto mayor es el contacto de un cliente con las interpretaciones psicoanalíticas -un contacto siempre comprometido, porque exige creer en ellas-, más frecuentemente aparecen las neurosis sexuales. ¿Puede llamarse a esto liberación sexual? Freud no ha liberado a la humanidad, sino que la ha humillado. Ha pretendido que el hombre no se sienta ya dueño de sus actos. Según Freud, nuestros actos responderían siempre a una motivación inconsciente, de tal manera que no quedaría espacio para la libertad: el hombre de la interpretación freudiana no es más que un autómata instintivo al servicio de la pulsión sexual, más o menos latente".
¿No hay nada de verdad en las teorías de Freud? "Algo hay", responde el profesor Polaino. Pero añade que "en conjunto, son interpretaciones sin apenas valor científico". El premio Nobel de Medicina Sir Peter Medawar, ha calificado al freudismo como "uno de los pasajes más tristes y extraños de la historia del pensamiento del siglo XX". Eysenck añade que del psicoanálisis "sólo nos queda una interpretación imaginaria de pseudo-acontecimientos, fracasos terapéuticos, teorías ilógicas e inconsistentes, plagios disimulados de los predecesores, percepciones erróneas de valor no demostrado y un grupo dictatorial e intolerante de seguidores que no insisten en la verdad, sino en la propaganda".
Eysenck denuncia que los dogmas freudianos han logrado minar valores fundamentales para la civilización, subjetivizar las normas morales y perturbar el sano ejercicio de la sexualidad. Por cierto que se han infiltrado en el pensamiento y la vida del hombre de la calle, no a través de la lectura de las obras de Freud, sino de la muy grande influencia que él ha tenido sobre el "establish-ment" literario.
Al margen de toda ciencia-ficción, parece literalmente cierto lo que Máximo ha puesto en el irónico epitafio de la viñeta adjunta.

EL MATERIALISMO OFICIAL
Todas estas cuestiones merecen especial consideración cuando los Ministerios de Sanidad y Consumo y Asuntos Sociales han lanzado una campaña dirigida a los adolescentes y jóvenes, promoviendo el uso generalizado de preservativos. Según afirman, el objetivo es evitar enfermedades de transmisión sexual, especialmente el SIDA, y embarazos no deseados, que pudieran derivarse del creciente aumento de relaciones sexuales entre adolescentes y jóvenes.
Sin embargo, las motivaciones profundas de la campaña son muy dudosas, porque resulta increíble que los mencionados ministerios carezcan de los datos que proporciona la ciencia actual sobre estas cuestiones. Los responsables de la campaña parecen anclados en una sexología freudiana, superada ya hace lustros por los mejores psiquiatras y descalificada por los resultados que a la vuelta de 50 años están a la vista. Sólo podría explicarse, a nuestro parecer, por una ideología materialista-mesiánica subyacente en la mentalidad oficial. Aunque se pretende edulcorar la campaña con palabras tales como "valor" y "espíritu" (aunque también se emplea un lenguaje que ha podido ser calificado con razón de "ordinariez" y "chabacanería"), la realidad práctica es que reducen el hombre a pasión como han hecho, por ejemplo, Marx, Freud y Sartre -negadores todos ellos de la íntima libertad personal, ya obsoletos-, sin posibilidad de mantener el señorío propio de la persona sobre los desórdenes de la sensualidad. Incluso autores más razonables, simples agnósticos como el premio Nobel Albert Camus, han reconocido que los valores objetivos no existen o no encuentran fundamento racional si no es sobre una base trascendente (Dios). Por otra parte es bien elocuente el hecho histórico al que estamos asistiendo: los países del Este europeo que han pasado 70 años bajo un materialismo oficial y persecutorio, estallan en manifestaciones de júbilo tras sacudirse el yugo opresor de los sentimientos religiosos (los más profundos del hombre) y suspiran por un renacimiento del cristianismo (por no hablar del fracaso económico)
Pero lo más llamativo quizá, es que los datos acumulados hoy en día por los científicos -que conocen o deberían conocer las autoridades sanitarias- desmienten los fines que se presentan como justificantes de conductas que por lo demás, son tenidas por inmorales en las más importantes tradiciones éticas. Frente a ellas la campaña representa una verdadera "revolución ética" injustificada que no puede traer más que un mayor desequilibrio social.

JUZGAR RACIONALMENTE LA CAMPAÑA
Aunque ignoramos -no podemos juzgar por tanto- las intenciones íntimas de los promotores de la publicidad oficial de los preservativos entre los adolescentes, la campaña en sí, puede y debe ser juzgada racionalmente. No hace falta, para ello, la fe católica. La Conferencia Episcopal Española, que tan cautelosa se ha mostrado en los últimos tiempos en sus declaraciones tocantes a la actuación de la Administración pública, no ha podido por menos de hablar con claridad: "Creemos también, que esta campaña, atenta contra la ley de libertad religiosa: el Estado, en efecto, toma partido contra determinados grupos religiosos" (). Como es lógico, los argumentos de la Conferencia Episcopal son básicamente teológicos. Pero es preciso subrayar que la crítica a la campaña cabe hacerla desde presupuestos puramente racionales. Hay argumentos muy claros de índole estrictamente racional que manifiestan la irracionalidad de la acción del Gobierno en este punto.

EL DISFRAZ DE LA CAMPAÑA
La campaña oficial se ha pretendido justificar con razones sanitarias: evitar embarazos de adolescentes y el SIDA.
Lo curioso es que se hayan silenciado muchas cosas. Se ha ocultado, por ejemplo, que la promiscuidad sexual que se pretende directa o indirectamente, conducirá a muchos más embarazos y enfermos de SIDA que los que acaso evite el uso del preservativo. Se ha ocultado que el preservativo no es una barrera infranqueable para los espermatozoides, ni mucho menos para el virus del SIDA, que es 500 veces más pequeño. Se ha ocultado que campañas semejantes, con los mismos aparentes motivos se realizaron hace ya lustros en otros países con resultado bien distinto al anunciado por sus promotores ()
Se oculta que el uso de preservativos no es algo trivial, como pueda ser la venta de caramelos a la puerta de un colegio. La indigestión por caramelos es fácil de curar. Pero la virginidad, una vez perdida ya no se recobra. Y si no es en la relación legítima según la ley natural dentro del matrimonio, ese acto contrario a la naturaleza personal, tanto de la mujer como del varón, marca a la persona de un modo profundo. Si se continúa en la misma línea, se entenderá muy equivocadamente el matrimonio. La contracepción se considerará como "normal" (a muchos ya les pasa esto, lamentablemente). Reducirán la sexualidad a genitalidad y la persona a objeto; y el cónyuge a un ser amable... en la cama: un objeto intercambiable. Se disolverá el sentido de paternidad y de filiación, con lo cual -la experiencia ya es mucha- se disuelve la familia, se instala en la sociedad -sin remedio- el adulterio y la infidelidad como sistema. En fin, la tristeza salta a la vista en los rostros que circulan por las calles de los países que ya han llegado a esto. ¡Y es una experiencia bien comprobada! O sea, que no es un asunto trivial, del que podamos "pasar" nadie, cualesquiera que sean nuestros criterios éticos. Sólo una persona frívola e ignorante -lo escribo sopesando las palabras- puede considerar trivial la publicidad gubernamental promotora de los preservativos.

"EL TIMO DEL PRESERVATIVO"
El doctor Gonzalo Herranz nos facilita su opinión, en una entrevista difundida en diversos medios informativos.

- Profesor Herranz, ¿cómo ve usted la actual campaña oficial sobre los preservativos?
- Esta campaña se ha mostrado manipuladora y agresiva. Está induciendo a los adolescentes al permisivismo, los invita a un comportamiento promiscuo. Por no parecer gazmoño, ha caído en lo perverso. Ha hecho creer a muchos ingenuos e ingenuas que el preservativo es el talismán mágico del placer y la invulnerabilidad, tan apetecibles para los adolescentes. La campaña, cuando menos, es irresponsable. Ha desfigurado gravemente el mensaje de los máximos expertos en la materia, los centros para el control de enfermedades de Atlanta (EE UU). Ha callado su parte fundamental: que la abstinencia y la relación sexual con una pareja mutuamente fiel y no infectada son las únicas estrategias preventivas totalmente eficaces.

- ¿Qué consecuencias de la desinformación producida por la campaña, prevé usted a corto plazo? - No me gusta ser profeta de desgracias, pero habrá que echar un vistazo a las estadísticas de dentro de unos años y ver cuánta gente, que tendrán entonces 20 y 25 años, serán seropositivos. Son las víctimas de este timo del preservativo. Tenga en cuenta que la tasa de riesgo del preservativo está entre el 15 y el 20 por ciento. Es decir, fallan en uno de cada cinco o seis contactos sexuales. Mientras el SIDA siga siendo una enfermedad mortal, ése es un riesgo abrumador.

- Como profesor de Bioética, ¿puede decirnos qué criterio ha de presidir el ejercicio profesional del médico y del farmacéutico que se ven instados a recetar o vender los preservativos?
- Si un médico o un farmacéutico juzgan, basados en datos reales, científicos y fiables, que el preservativo no da protección aceptable frente al virus de inmunodeficiencia humana, no están obligados a recomendarlos o a dispensarlos. Su decisión es racional y así deberán darlo a entender a sus pacientes o clientes.
- ¿Y si el Estado no está dispuesto a aceptar la objeción de conciencia de los médicos y farmacéuticos que no colaboren en su campaña y no prescriban o despachen preservativos?
- Esto sería, por un lado, una muestra de grave intolerancia, impropia de un estado moderno respetuoso de las libertades individuales. Nuestra constitución consagra la intangibilidad de las conciencias. Por otro lado, es la imposición violenta de una opinión moral particular: nadie incluidos los médicos o los farmacéuticos, puede ser obligado, en un estado de derecho, a desconectar sus convicciones morales de sus acciones técnicas, a llevar una doble moral, a actuar contra conciencia.

LOS DATOS DE J. LEJEUNE
El conocido y prestigioso profesor de La Sorbona, Jerome Lejeune, ha publicado un documentado artículo fundado en datos estadísticos inequívocos (), de los que se concluye -además de algunos extremos ya señalados aquí- que "la campaña a favor de los preservativos de goma no tiene nada que ver con la naturaleza de la epidemia (del SIDA). Se sabe que el elemento esencial para que haya contagio es la presencia de la sodomía o por intercambio de jeringuillas, vale decir, por inyección directa del virus o por vía intravenosa. Lo contrario queda descartado por la ausencia casi absoluta de transmisión del virus entre las lesbianas".
(En España, el 85 por ciento de los enfermos de SIDA son homosexuales o drogadictos. Solamente el 4 por ciento han adquirido el SIDA por transmisión heterosexual, y la mayoría de estos contagios son debidos a la prostitución o a las relaciones de las parejas en que uno de los miembros se encuentra en otro grupo de riesgo. En definitiva, el riesgo de contraer el SIDA por transmisión heterosexual es prácticamente nulo en el caso de las relaciones matrimoniales estables; en cambio las relaciones sexuales irregulares son más peligrosas. Y éstas resultan fomentadas por la difusión de los anticonceptivos entre los adolescentes).
El Dr. Leujene dice: "que nuestros lectores y lectoras tengan a bien perdonar la crudeza de los hechos científicos expuestos en este artículo. El propósito es la honestidad, y resulta necesario exponerlos debido a una sociedad que rehusa decir lo que todos los científicos están de acuerdo en haber observado". El SIDA -explica Leujene- "es una simple consecuencia del empleo desordenado de la naturaleza: la vagina que está abierta al exterior para permitir la propagación de la especie (entrada del esperma y, nueve meses más tarde, salida del niño), sería una puerta abierta a todas las infecciones si no estuviera protegida por una mucosa especial que los virus casi no pueden penetrar. Por el contrario, el recto, destinado a asimilar los últimos alimentos útiles, contiene vasos linfáticos extremadamente desarrollados que reabsorben casi todo (incluso los medicamentos y los virus). Esta disposición no es normalmente peligrosa porque este conducto no se abre excepto para descargar el contenido del recto sin dejar entrar nada. Por lo tanto, no es en absoluto sorprendente que un uso anti-natural, por inyección dentro del recto o en la circulación venosa, abra la puerta a un virus que, normalmente, no tendría casi oportunidad alguna de éxito"
Leujene termina recordando: "al que viola las leyes naturales, solamente Dios puede perdonarlo verdaderamente; el hombre perdona a veces; la naturaleza no perdona jamás: ella no es una persona"

LO MAS SEGURO
La Administración pública está cargando pues con una responsabilidad moral de enormes proporciones. ¿Se atrevería a dar cuenta de los resultados de su campaña actual dentro de 15 o 25 años? Hay cosas que no requieren el título de profeta para ser profetizadas. El cruel resultado de la droga estaba cantado. Y sin embargo, lejos de perseguirse como lo que es, un crimen horrendo, se fomentó. Ahora, ¿cuántas familias padecen una tragedia incomparable y casi siempre irreversible? Las consecuencias disolventes de la neurotización freudiana de la sexualidad ya están más que cantadas: están a la vista. ¿Cómo es posible que los responsables de la salud pública y del bienestar social de un país civilizado cierren los ojos a realidad tan palmaria?
Antonio Orozco

(*) En Argentina, la misma campaña ha fracasado rotundamente. Recientemente se ha difundido (Clarín 23.10.05) que casi el 90 % de los contagios de SIDA se producen por vía sexual. Los programas de "salud reproductiva" que llevan adelante esta campaña de "sexo seguro" basada en el uso de anticonceptivos y preservativos, a pesar que haberse presentado como elemento indispensable para eliminar los embarazos adolescentes y el SIDA, han revelado que producen el efecto inverso: aumentan los embarazos precoces y las enfermedades de transmisión sexual, incluido el SIDA. ¿Quién se hace responsable ahora?

Pro-Vida
www.infovida.org.ar Más información
www.politicaydesarrollo.com.ar23/10/2005

13 noviembre 2005

La Transa

Las modas cambian, vienen y van. Formas de vestirse, salir, bailar, hablar, etc. La mayoría no tienen repercusión futura en la vida de las personas. Algunas sí y mucho.
Parecería ser que se quiere imponer como moda que las chicas vayan al ataque y provoquen sexualmente los chicos. Es lo que hace poco tiempo el diario Clarín escribía en la tapa de su suplemento joven: "Las chicas van al frente. Esta tendencia está cambiando los hábitos sexuales juveniles. Ahora, ellas pisan fuerte y atacan; y ellos, desorientados, se repliegan". Y hablaba de una "nueva generación de chicas poderosas". El tono de la nota era casi positivo. Incluso parecería que una chica que no se transa al primero que encuentra en un boliche no es nadie.
Este artículo pretende analizar la transa a fondo. No es sólo para leerlo, es más bien para pensarlo; y mejor, para charlarlo con amigos.

¿Qué se transa?

  • Es un tipo de relación entre chicos y chicas absolutamente ocasional, basada en el contacto físico y sensual. La transa sucede entre personas sin ningún lazo afectivo que las una: no son novios, ni siquiera amigos. La transa es una relación que no genera ningún tipo de relación futura. Es sólo una relación que dura un rato de una noche. Es consecuencia de haber vaciado de contenido el noviazgo… lo que hace que no valga la pena ponerse de novio. Hace poco una chica me decía que había cortado con su novio porque vivía pensando en otros chicos… La transa no supone amistad, es más casi supone que no la haya.
  • La transa aparece cuando se renuncia al ideal de un amor profundo para dedicarse al simple consumo de placer sexual. Es la quinceañera que no busca establecer una relación de amistad estable, busca sólo la experiencia sensual del besuqueo lujurioso y desaforado. Excluye la fidelidad por definición, ya que ambos saben que antes hubo muchos/as otros/as y dentro de un rato vendrán más… Quienes se transan mañana posiblemente ni se saluden, quizás nunca sepan quien realmente era el otro/a, o ni se acuerden su nombre que quizá nunca supieron. Se "divierten", pasan el rato gozando del otro cuerpo apretado, y después, si te he visto no me acuerdo. Piensan que el beso no deja secuelas, que sólo tiene parte de la carga de "electricidad" propia de los actos eróticos, una buena dosis de aventura y ningún compromiso.
  • Llegados a este punto nos podemos preguntar, entonces ¿qué es transar? Según el diccionario: "Transigir, ceder, llegar a una transacción o acuerdo". Es decir, cierto tipo de acuerdo o comercio. Es nuestro caso, se trata de una transacción de tipo sensual. Uno cede su cuerpo a otra persona para que ésta le extraiga el goce sexual que pueda dentro de unos ciertos límites. A cambio eso le da derecho a gozar del cuerpo del otro. Es decir un acuerdo de usar y dejarse usar. Entonces, en primer lugar se transa un placer erótico.
  • Pero se transan también otras cosas que no son tan evidentes…: se intercambia un placer de falsa autoestima, ya que ambos fingen que se valoran el uno al otro… y esto los haría sentirse valorados… Se cambia un ahora -el goce del momento presente- por una dignidad a largo plazo: ¡hay secuelas!, no es algo de un fin de semana, se renuncia a un amor en serio. Repercute en el enfoque del matrimonio, en la felicidad en el matrimonio, en las relaciones sexuales en el matrimonio, en la fidelidad matrimonial…

¿Es sexo sin sexo?

  • ¿Es la transa algo inocente? Ese besuqueo desaforado, apriete y manoseo es indudablemente una actividad de tipo sexual. No pienses que si no se llega al acto sexual completo, no has tenido sexo. Sólo basta preguntarte qué es eso que sentís en esa situación, y la respuesta es que sentís bullir la sexualidad como el burbujeo de una olla hirviendo. Despertar la pasión sexual sin intención de tener una relación sexual, sólo para gozar de sensaciones sensuales es vaciar la sexualidad. Además, es usar egoístamente otra persona (aunque voluntariamente se deje o manifieste el mismo deseo desaforado: el hecho de dejarse usar no le quita egoísmo; ¡los dos sólo piensan en sí mismos!). La actividad sexual es progresiva, el excitamiento es sólo el comienzo. Cuando, sentado al volante del auto, ponés en marcha el motor, embriagiando ponés primera, comenzás a acelerar… has comenzado a manejar aunque el auto todavía no se haya movido un centímetro. De la misma manera, comenzar a tener sexo, es una actividad sexual aunque no se acabe con el "proceso".
    El problema con la transa es que vacía la sexualidad de contenido. Pretende no ser una actividad sexual, sino solamente un modo de divertirse. Este engaño -pensar que propiamente no se está teniendo sexo- se debe a que es una versión barata y banal del sexo. Pero no hace falta tener la inteligencia de Einstein para darse cuenta que es el comienzo del acto sexual (todo acto sexual comienza por ahí). Es sexo sin compromiso, sin amor… y sin terminar el "proceso". Al pretender ser sexo sin sexo, abarata el sexo. En cierto sentido se parece bastante a la prostitución: sexo con una persona anónima, sin cara ni nombre. Es una especie de prostitución limitada y recíproca. Se parece bastante porque la mutuo excitación sexual se hace por puro canje: la chica ofrece su cuerpo a cambio de afecto, compañía, placer, etc. Es sexo descartable, de usar y tirar… y realmente lo hace ya que después del uso se "tira" a la otra persona. Se parece también bastante a la masturbación: degradar el propio cuerpo con la autoestimulación sexual, de nuevo sexo sin amor (aquí se usa el cuerpo de otra persona, pero sólo su cuerpo, no importa quien es…). Si el sexo se reduce al sólo placer, nunca se lo podrá gozar en toda su profundidad, porque el sexo es otra cosa. El placer es sólo un componente y no es el más valioso, adquiere valor e incluso intensidad de gozo del resto.

Entonces, ¿es sexo sin amor ni afecto?

  • Sí, y esto produce un vaciamiento afectivo. Se abre la intimidad, se da una de las mayores muestras de intimidad y afecto a quien no se conoce. Es como una bomba de agua que funciona en vacío: se funde. Normalmente se busca llenar en déficit afectivo. En el rato de transa se siente una experiencia parecida a ser querido por otro, pero en realidad se es usado (y uno usa al otro). Por eso, siempre, la chica se siente usada: esto por la sencilla razón de que lo es. Ella puede tratar de convencerse de que no hay problema, pero al día siguiente, cuando se encuentre sola consigo misma, comprueba que la transa no sólo no le llenó el vacío afectivo que pretendía llenar sino que lo profundizó. Además se siente una basura. La transa afecta seriamente la estabilidad afectiva y emocional de una persona.

¿Es intimidad entre dos muy próximos desconocidos?

  • Con la transa simulás una intimidad que no existe. Los cuerpos que intiman son cuerpo sin nombre, sin cara, sin historia ni futuro. Siendo que un cuerpo sin alma es un cadáver, se podría decir que el la transa intiman dos cadáveres vivos. Se disfruta el cuerpo de otro por un rato. Sólo importa lo bien que uno se lo pasa ese rato, después no importará si el otro/a existe o no. La transa supone el uso del cuerpo de una persona que no te importa/no le importás (al mismo tiempo que tu cuerpo sea usado por él/ella). Una persona que no estará ahí cuando la necesités. Esto hace mucho daño ya que compartir la intimidad sin ninguna carga afectiva produce un quiebre en la persona: se realiza una fractura entre la sexualidad y el amor… Quiebre que será muy difícil de reparar… que hace a la persona incapaz de amar de verdad ya que la sexualidad deja de ser vehículo de amor para ser expresión de un hambre insaciable de placer. Por eso, destruye la capacidad de amar.

¿Es entonces una gran mentira?

  • La transa funciona en el reino de la falsedad y la hipocresía. En sí misma es una gran mentira. Se finge amor para conseguir placer, se finge alegría para esconder el vacío interior, se miente en las palabras de afecto y valoración (que si es linda, se la quiere…), se miente dando signos de intimidad con quien se no se ha intimado, se miente incluso en los datos personales (dónde vivís, quién sos, qué hacés, colegio, nivel social…). Quiere ser sexo sin sexo, expresión de amor sin afecto, intimidad sin intimar, unión que no une… Interiormente se desearía que toda esa mentira fuese verdad, uno puede imaginarse los deseos más profundos de la "trensera": "simulá que me querés", "decime cosas lindas como si las pensaras", "fingí que te importo", "decime que me querés aunque yo sepa que es mentira"…

¿Es verdad que no tiene consecuencias?

  • Se es infiel anticipadamente y se compromete la fidelidad futura. Cuando le pregunto a una chica, ¿te gustaría encontrarte a tu madre trenzada (porque "transar" consiste en "trenzarse") con el jardinero, o con el profesor de tenis, o con el vecino? Siempre la respuesta es "no", seguido de un "es muy distinto, porque ella está casada". OK. Pero no es tan distinto, la diferencia es sólo cuestión de tiempo porque vos vas a estarlo… Y la fidelidad comienza antes. Es poder decirle a tu marido: te he sido fiel desde antes de conocerte, me he guardado para vos. Muchos han querido besarme, otros han soñado con manosearme… pero yo siempre he sido tuya. Además, no parece que quien no ha sabido ser fiel antes… lo vaya a ser después… En cualquier caso la debilidad está ahí, es un hecho… la fortaleza para vencer en el futuro habrá que conseguirla…
  • Compromete el futuro afectivo. Como es evidente las emociones que produce la pasión sexual son fuertes e intensas. Esas emociones "imprimen" en la memoria (ya sea física, sensible, "fotográfica", imaginativa…) imágenes no fáciles de borrar. En el futuro tendrás lo que los ingleses llaman "flash back", es decir idas al pasado como con flashes de vivencias pasadas. Será muy romántico estar besando a tu marido, a aquel a quien has entregado tu vida, y que por tu cabeza vayan pasando, en ese momento tan íntimo, los flashes de lo que sentiste besando a tantos diferentes compañeros de transa, y sus caras, y sus risas. No, no estarás sola… muchos te acompañarán sentimentalmente.
  • Crea adicción sexual. La actividad sexual desordenada -es decir, fuera del cauce natural para la que fue creada- crea dependencia, es decir una cierta pérdida de la libertad. Esto se debe que el sexo cumple la ley de las repeticiones decrecientes que rige para los placeres meramente físicos: hay que aumentar las dosis para conseguir el mismo efecto... Cuanto más frecuente es el placer, menos complace y genera una ansiedad mayor por el placer. Así, mientras aumenta la ansiedad por el acto, el placer que produce, disminuye. Ni se puede renunciar al acto, ni se puede disfrutar de él.
    La adicción sexual es una de las famosas dependencias que estudian los psiquiatras: alcohol, droga, juego, sexo. Son actividades adictivas y progresivas. Es por esto que cada vez se pierde más el dominio de la situación y la capacidad de rehusar transar… llega hasta casi no poder estar sin… Uno ha llegado a convertirse en un sexoadicto. En este caso transadicto… te encontrás transando casi sin darte cuenta…
  • Además, no hay que olvidar que la sexualidad es una actividad que por su propia naturaleza tiende a completar el acto sexual. De aquí que la transa siempre conduce a las relaciones sexuales. Antes o después, y más bien pronto, ya que los prolegómenos pronto dejan de satisfacer… ¿para qué cortar cuando viene lo "mejor"?
    El autoengaño es muy frecuente, se piensa que se tiene la situación perfectamente controlada… cuando en realidad hace tiempo que se perdió el control. Y entonces, siempre pasa lo mismo… la cuestión termina con la chica llorando… "nunca pensé que íbamos a llegar tan lejos". Pero en realidad, llegaron a donde era evidente que iban a llegar, adonde se dirigían las acciones que comenzaron. Es que cuando se entra en el juego de la excitación sexual por más que piense que es un “dejarse llevar con límites”, ¡es falso! En fondo ellas saben que encienden una mecha, saben cómo quema y al final la única variante es lo "experto" que sea el otro… Y ellas pararán si pueden …. y si el chico, sobre todo, no la engaña con palabras, palabras, palabras ….
  • La transa es uno de los sistemas más eficaces para provocar un rápido descenso de la autoestima. Notemos que la pureza frecuentemente es un problema presente en personas con otro tipo de problemas. No se suele encontrar en personas exitosas. Es raro que buenos alumnos/as los tengan. Lo mismo personas con alta autoestima. No encontrarás personas con alta autoestima que sean promiscuas. El perfil clásico de la persona con problemas de castidad es: frustrado en su trabajo, falto de madurez, bajos niveles de alegría, déficit afectivo y con baja autoestima. Pero es un círculo vicioso: la promiscuidad baja la autoestima, la baja autoestima inclina a agarrarse con desesperación al primero que dé bolilla, esto facilita la explotación de la "víctima", que después de transar se siente más basura que antes. Pero ¡NO OLVIDES QUE SE PUEDE SALIR DE ESTE CIRCULO DE ESCLAVITUD!
  • La transa hace mujeres egoístas, inseguras, desequilibradas emocional y sexualmente. Mujeres falsamente agresivas… afectivamente necesitadas de más experimentos… siempre insatisfactorios –afectivamente insatisfactorios- y fuera del contexto de la procreación y hasta del buen gusto. Ellos saben que lo normal es que ellas quieran trenzarse, y las dejan venir… todo lo que aparentemente es conquista de la mujer es absolutamente falso, forma parte de un rito que tiene sus tiempos, sus mentiras, ….
  • Promiscuidad se define como la intimidad sexual tenida con cualquier persona, el frecuente cambio de compañero/a de aventuras. La transa te introduce en el exclusivo club de los promiscuos. ¡Bienvenida! Implica que ya no tenés intimidad. La has perdido… por que se la has ido dado a cualquiera… ha quedado desparramada por diferentes boliches. Has ido dando "cachitos" de vos misma a diferentes chicos… Por eso se pierde la vergüenza (por definición es la defensa de la propia intimidad): no hay intimidad que proteger.
  • Se consigue una fama de chica fácil. Los chicos saben distinguir entre chicas fáciles -aquellas de poco valor, a las que hacés lo que querés sin problema, ya que se deja hacer de todo- y las difíciles. Y saben qué buscar según qué sea lo que quieran en cada momento: gozar un cuerpo o ponerse de novio. Es cuestión de hacer una pequeña encuesta para ver cuánto valoran los varones a las chicas "transeras", si las valoran o las desprecian.
  • ¿Qué contará el chico a sus amigos? Una versión ampliada y aumentada de lo que pasó. Mejor no poner por escrito los términos en los que se referirá a la chica con sus amigos… Para no pocos chicos salir con una chica es un desafío: a ver hasta donde puedo llegar con esta…
  • Además, no te olvides de que todos esos chicos con los que has transado no se morirán, no se irán a vivir a Argelia… en el futuro te los seguirás encontrando por la calle, en un restaurante… a veces tendrás que presentarlos a tu marido e hijos… ¡Qué lindos recuerdos para compartir juntos!

¿Algún otro riesgo?

  • La transa con frecuencia se relaciona con el abuso de alcohol. ¿Por qué? La excusa es que con un poco de alcohol se hace todo más divertido, pero la realidad es que es necesario perder la natural vergüenza, ser menos dueño de sí mismo, etc., para entrar en la dinámica de la transa. Investigá en la vida de "porno stars"… no es extraño que hayan tenido que emborracharse o drogarse para ser capaces de actuar… sólo al principio… ya que después se acostumbran porque se han corrompido. No es raro que los chicos inciten a las chicas a que tomen… precisamente para que les cueste menos dejar hacer, pierdan inhibiciones…
    Incluso sucede que no sepas qué ha pasado exactamente… y al día siguiente tener que preguntarle al otro hasta donde llegó… porque vos no lo sabés.
  • Me expongo a ser violada. Esto no es una exageración. El mensaje que le doy al chico es de total disponibilidad sexual: estoy a su merced. No es extraño que donde ella quiera parar… él no quiera… y todo se convierta sólo en una cuestión de fuerza. O si has bebido de más… ni siquiera de fuerza… serás observadora no muy consciente de lo que te pase… y no tendrás capacidad de hacer nada para que no pase. Si entrás en la dinámica de la sexualidad, donde pares quizá no dependa de vos…
  • La transa se puede considerar incluso un trabajo pago. ¿Has visto que muchos boliches promocionan con grande carteles "damas gratis"? ¿Será un acto de caballerosidad masculina o que esperan, suponen o pretenden que las chicas "paguen" su entrada con "trabajo"?

¿No será promover el machismo?

  • La transa es enseñar a los hombres que pueden usar a las mujeres, que a ellas les gusta ser usadas, besuqueadas, manoseadas…. por cualquiera. No te olvides que algunos hombres piensan que las mujeres en realidad quieren ser acosadas sexualmente, que sólo presentan una oposición formal… pero en el fondo disfrutan incluso una violación tanto como ellos…

Pablo Writes
(4/9/01)

Chiflando y aplaudiendo

Aquí queremos hablar de cómo han de ser las relaciones que anteceden al matrimonio, para que alcancen su verdadero fin –no demasiado lejano: la constitución de una familia edificada sobre la fidelidad de un amor conyugal abierto a la vida.
Rafael Ibáñez. www.masalto.com

Uno de los más prestigiosos psiquiatras contemporáneos, Victor Frankl, en su obra Psicoanálisis y existencialismo, afirma: hasta en el amor entre los sexos no es lo corporal, lo sexual, un factor primario, un fin en sí, sino simplemente un medio de expresión. El amor puede existir sustancialmente, aun sin necesidad de eso. Donde sea posible lo querrá y lo buscará; pero, cuando se imponga la renuncia, el amor no se enfriará ni se extinguirá (...) El amor auténtico no necesita, en sí, de lo corporal ni para despertar ni para realizarse, pero se sirve de ello para ambas cosas. El hombre es un compuesto de alma espiritual y cuerpo, para quien de veras ame, la relación física, sexual, no es sino un medio de expresión de lo que constituye el verdadero amor, es decir, de la relación espiritual... (H. Vitae).

Aplazando la satisfacción del impulso sexual se logra algo muy esencial: la profundización en la dimensión espiritual del amor, que es la que está llamada a permanecer por encima de todos los avatares físicos o psíquicos que una larga vida puede deparar. El sacrificio que supone la continencia enseña a amar con el alma, con la mente y con la voluntad, que es lo más perfecto y digno que hay en el hombre. Este sacrificio es la primera gran donación que se debe a la persona amada, la primera manifestación de un amor verdaderamente personal. A veces uno de los novios –con más frecuencia él– exige del otro la entrega corporal como prueba del amor. Ahora bien, un amor que exige pruebas está pronunciando su propio veredicto, dice J. Fischer. Lo propio del amor es dar, no tomar o poseer. Amor es sacrificio –escribía Pemán–, y para ser feliz hay que saber mirar las flores sin arrancarlas. ¿Qué sucede si son arrancadas? Que al poco tiempo se encuentra en las manos una flor ajada, marchita, sin misterio y sin encanto, sin aroma y sin color, apolillada.

Respecto a los actos que naturalmente llaman a la plena relación sexual, no se puede realizar aquello cuya natural consecuencia sea precisamente lo que se trata de evitar. Yo no puedo tirar una piedra enorme contra un cristal si no quiero romperlo, y si la tiro, por más que proclame que no quería romper el cristal, lo quise. En muchas cosas de la vida, el qué depende del cómo o del cuándo. El cómo y el cuándo a menudo modifican el qué, y lo transforman profundamente. El discurrir del río por su cauce es plácido y fecundo. Cuando se sale de ahí, más que río es una potencia desmesurada, un monstruo cruel, que arrasa cuanto encuentra a su paso. El agua es saludable según cómo se encuentre. Si está contaminada, una gota puede bastar para llevar al cementerio.

En la conducta humana, lo que hacemos, depende en buena parte del cómo y cuándo lo hacemos. Concretamente, si es usada la genitalidad en el contexto que le es propio, al servicio del amor auténtico, ordenado a la vida, entonces no sólo es algo bueno, sino que hasta puede ser santo. Los que buscan el goce físico antes del matrimonio se dejan casi inevitablemente arrastrar hasta centrar en él sus sentimientos y llegan así al matrimonio, viendo ante todo en el otro un instrumento de placer que el matrimonio permite siempre utilizar a voluntad. Cambiar de visión después del matrimonio resulta muy difícil. La búsqueda del goce sexual antes del matrimonio inclina el espíritu a no ver en ello más que una satisfacción personal y natural en sí, con lo cual se le hace a uno mismo difícil ligarla al conjunto de la vida (Lecreq).

Un informe de la Union Internationel des Organismes Familiaux (München), decía lo siguiente: Las relaciones sexuales completas, y también las caricias que producen el orgasmo, ejercen una fascinación en los enamorados que les impide normalmente comprobar y apreciar con exactitud los demás elementos de la armonía matrimonial, en especial los psíquicos y los espirituales. De ello se desprende frecuentemente el desengaño después de la boda, que es tanto más grave cuanto que los factores despreciados apenas pueden recuperarse después. Por el contrario, cuando la adaptación psíquica y espiritual se produce con plena conciencia, la base es más sólida y la experiencia sexual dentro del matrimonio se enriquece y se rejuvenece cada vez más. Las experiencias sexuales prematrimoniales, lejos de ayudar al amor, lo deforman. El que llega al matrimonio sin aportar a él la integridad de su impulso emocional es como un corredor que se hiere en el pie antes de alinearse para la carrera. No hay pues medio de prepararse al matrimonio por experiencias carnales... Por eso no debe extrañar ni escandalizar que los casados tengan que comenzar por un aprendizaje, pasen por un período de tanteos y que su comportamiento sea a veces torpe. Es inevitable y hay que decir y repetir con insistencia que el aprendizaje del matrimonio es imposible antes del matrimonio. Hay que decirlo y repetirlo, porque se intenta sin cesar eludirlo (Lecreq).

La peculiar estructura biológica manifiesta con deslumbrante claridad que la relación genital está intrínsecamente ordenada a la procreación. Incluso en el caso de matrimonios estériles; en éstos sucede algo semejante a la ceguera: los ojos no pueden ver, pero en todo caso, la razón de ser del ojo es la vista; toda su estructura y contexto está ordenado intrínsecamente a la visión. Como se trata de procreación humana, conlleva la educación de los hijos que resulten concebidos. Y, la dignidad de la persona humana, exige que lo sean en el seno de una verdadera familia, es decir, con garantía de estabilidad y posibilidades de educación adecuada, lo cual sólo se cumple en el matrimonio indisoluble. En efecto, en el trato entre personas, dar la mano no es lo mismo que dar la pezuña: dar la mano es un acontecimiento espiritual; es dar algo del espíritu, la amistad, la comprensión, quizá el perdón, la lealtad, etcétera. La mano no es simplemente un trozo de carne, de huesos, nervios, venas y uñas. Dar la mano es dar algo del núcleo personal. Por lo mismo, la entrega total del cuerpo, es también entrega total de la persona, lo cual sólo tiene sentido en el matrimonio. Precisamente por esa significación espiritual y la finalidad del acto conyugal, ordenada al amor y la vida, la misma unión resulta ilegítima y contraria a la naturaleza del acto fuera del ámbito de la unión matrimonial indisoluble. La plena unión sexual significa, en efecto, el hacerse una sola carne.

07 noviembre 2005

Las ideas claras

Para no confundirse